21.6.08

El Tucumano

Vieron el loco ese El tucumano Lo obligaron a ir a la plaza a hacerle el aguante a la Cristina Habrá pensado digo yo así como quien aventura una conjetura Habrá pensado Los muchachos quieren que vaya a la plaza a áplaudir a Crístina Nunca fui a Buenos Aires Me págan el viaje la cómida y cien pesos Ya que estamos áprovecho un par de días sin trábajar O me quedo No voy a cónocer Buenos Aires No me págan el viaje ni la cómida y séguramente más tarde o más témprano me la cóbran Sigo sin láburo y déspues Si es verdad que más o menos fue así la cosa imagínense que mucha opción no le quedaba Lo cierto es que se subió al colectivo sin sospechar siquiera que iba a ser la noticia más importante del día Y sí fíjense ustedes que en las épocas convulsionadas de piquete y cacerola, de paranoia y cleptocracia en las que nos encontramos Bueno, les concedo que la parte de la cleptocracia siempre estuvo Si por ahí en un momento pensamos que no, bastó que pasara el tiempo que casi todo lo pone en su lugar para darnos cuenta de que simplemente habíamos estado algo distraidos Retomo la idea En este tiempo donde pasa de todo, todos acontecimientos muy dignos de nuestra atención y en particular la de los multimedios resulta que se viene a robar el protagonismo un hijo de vecino un don nadie un ladrillo más en la pared un tal Carlos Marriera
Si bien acontecimientos muy importantes de la historia de nuestro país sobrevinieron el espacio en cuestión, no faltará quien la use para pasear al perro la plaza es una plaza No hay para-avalanchas ni alambrados como en una cancha de fútbol entonces las banderas los carteles los globos las pancartas y el resto de la parafernalia van agarrados de donde se pueda A la bandera de Evita y el Che la tiene uno, al estandarte de la jotapé lo lleva otro, la bandera de Perón y Jesús la colgamos de aquel árbol a estos pibes les damos para que tengan los globos Y los pasacalles si los colgamos de los semáforos no salen en la tele, entonces para qué los pintamos Más vale los atamos de esos faroles y a otra cosa compañero
Y será que a Dios no le agrada el clientelismo no se si cabe alguna otra interpretación o es así nomás y no hay más vuelta que darle porque sino quién lo manda a escupir esa ráfaga de viento que se embolsó en el pasacalles que hizo fuerza en el farol de hierro que se desprendió de la columna y que fue a darle en la cabeza al popular tucumano
Suspender el acto Vos sos loco o pelotudo Con toda la guita que gastamos en las bases Y el escenario Dos días tardaron en construirlo No se suspende A lo sumo hacemos un minuto de silencio antes de empezar